Durante esta época del año es fundamental informarse acerca de cómo mantener una piel sana y evitar ciertas patologías asociadas a la piel. En este artículo hablaremos sobre los cuidados para la piel de los más pequeños, particularmente acerca de cómo ésta puede presentar diferentes afecciones o requerir protección específica en el verano.

La piel de los bebés es muy vulnerable, pues toma tiempo en adaptarse a las condiciones externas luego de su nacimiento. Los cambios del clima, la humedad, la exposición solar y otros factores pueden traer problemas en su piel, de los cuales los más comunes son:

• Dermatitis atópica: El bebé presenta piel seca e irritada, con inflamación y enrojecimiento.
• Generalmente es causada por alergias o hipersensibilidad.
• Queratosis pilar: Es una condición común e inofensiva, en la que la piel se muestra áspera, similar a la piel de gallina.
• Xerosis: Se presenta una resequedad extrema de la piel, de apariencia áspera con escamas. Se da por deshidratación u otros factores como falta de humectación en ambientes muy secos.
• Pitiriasis alba: El bebé presenta pequeñas manchas con falta de color en la cara y el cuello, a veces inducidas por la exposición solar.

Muchas personas creen que es saludable tomar sol a cualquier edad. Sin embargo, la piel del bebé no debe ser expuesta a los rayos solares de manera directa en sus primeras semanas, ya que esto puede conllevar a la aparición de manchas o causar quemaduras.

Como cuidados básicos, se recomienda:

• Optar siempre por mantener al bebé en un lugar con sombra y fresco.
• Si debe exponer al bebé al sol, utilizar ropa que cubra sus extremidades, de preferencia con filtro UV, además de gorro.
• Si el bebé tiene más de 6 meses, utilizar protector solar con factor mayor a 30. Reiterar su aplicación cada 40 minutos máximo.
• Mantener la piel del bebé hidratada con algún tipo de emulsionado hipoalergénico.
• Mantener al bebé hidratado y evitar bebidas de fantasía como gaseosas o jugos no naturales.

¿Cuándo podemos usar protector solar?

Los protectores solares en bebés menores de 6 meses pueden causar irritaciones.

Después de los 6 meses se recomienda probar bloqueadores hipoalergénico, con factor de protección entre 30 a 50, en una pequeña zona de la piel del bebé, y observar si produce alguna reacción alérgica.

Al momento de dejarlos jugar al sol, debe ser por poco tiempo y no durante el período de radiación extrema que va entre las 11:00 y las 16:00 horas. También se aconseja el uso de un gorro y una camiseta, incluso cuando se esté bañando, de preferencia confeccionada con tela que tenga protección UV.

Fuentes:

http://www.bebesymas.com
http://www.salud180.com
http://www.serpadres.es